El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, recibió este viernes en Toledo al príncipe heredero de Japón, Naruhito, ante más de un centenar de medios de comunicación que han sido fieles notarios de la jornada.

Con una gran satisfacción ante la elección del heredero nipón por Castilla-La Mancha, el presidente autonómico le agasajó con una edición numerada en inglés y español del libro anónimo "Los veintiún libros de los ingenios y máquinas de Juanelo Turriano". Se trata de una colección de siete tomos (dos en inglés y cinco tomos en español).

La obra que se lleva Naruhito es una revisión casi completa de las artes mecánicas conforme eran conocidas y practicadas en el siglo XVI que ofrece numerosos detalles acerca de los cuales no existe hoy ninguna otra información disponible.

La entregada al heredero japonés es la primera edición facsímil del manuscrito encuadernado en cinco tomos conservado en la Biblioteca Nacional precedidos de dos volúmenes con la trascripción de los textos y de los 500 dibujos que tiene el códice. Se han realizado dos ediciones venales diferentes de 500 ejemplares numerados cada una de ellas: la primera con el texto de la trascripción en castellano y la segunda en inglés.

También se añade un DVD elaborado medios gráficos de Castilla-La Mancha sobre 'El Artificio de Juanelo' editado en inglés.

Junto a este documento, por el que el mandatario japonés había demostrado gran interés, el presidente Barreda le obsequió con una edición especial de El Quijote elaborado con motivo del IV Centenario de la primera parte de esta obra universal.

En 2005, con ocasión del IV Centenario, en Castilla-La Mancha se quiso contribuir a la difusión del Quijote con una edición preparada para la ocasión por Francisco Rico, uno de los mejores conocedores de nuestra literatura y, muy singularmente, del Quijote. Suya es la edición más completa y rigurosa de cuantas se conocen.

Los mejores vinos

Además, el Príncipe recibió una muestra de los mejores vinos de la Región en un estuche de seis botellas. Castilla-La Mancha es el mayor viñedo del mundo. Sus 600.000 hectáreas suponen el 50% de la plantación española, el 17% de la europea y el 8% de la mundial. Pero, además, detrás de estos porcentajes están más de nueve millones y medio de jornales que equivalen a unos 38.000 puestos de trabajo fijos y un sector del que dependen 70.000 familias de nuestra tierra.

El estuche de vinos se completa con una ficha técnica de cada una de las seis botellas en español, japonés e inglés.

Por último el presidente Barreda entregó una caja con marionetas para su Alteza Imperial la princesa Aiko. En una caja artesanal realizada para la ocasión se han preparado las marionetas de Don Quijote y Sancho Panza que se realizaron con motivo del IV Centenario.

El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, entregó al heredero nipón sendos libros de la Ciudad Imperial, 'Los Privilegios de Toledo' y 'Postales de Toledo' de Luis Alba.

Libro de Honor de Castilla-La Mancha

El príncipe Heredero de Japón, Naruhito, cuyo nombre significa 'Corazón grande', firmó en el Libro de Honor de Castilla-La Mancha antes de conocer el lugar en el que estuvo ubicado el artificio de Juanelo Turriano.

Además del Príncipe Heredero de Japón, han sido muchas las personalidades que han plasmado su firma en el Libro de Honor de Castilla-La Mancha, Sus Majestades, los Reyes don Juan Carlos y doña Sofía; el Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón; los ex presidentes del Gobierno de España, Felipe Gónzalez y Leopoldo Calvo Sotelo; Isaac Rabín; Hillary Clinton; Jorge Sampaio; Ban Ki-Moon; Manuel Marín; Enrique Múgica; Moshé Katsav, así como un destacado número de ministros del Gobierno central de distintas legislaturas y otros tantos presidentes autonómicos.

A las puertas del toledano edificio de Doncellas, sede actual de la Presidencia del Gobierno, estaban esperando a Naruhito, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page; el consejero de Industria y Sociedad de la Información de Castilla-La Mancha, José Manuel Díaz-Salazar; la consejera de Cultura de Castilla-La Mancha, María Soledad Herrero Sainz-Rozas y el delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano del Rey, así como el director del IPEX, Javier Vega.

Detalle del artificio de Juanelo Turriano

Antes de emprender viaje hacía Consuegra la comitiva se desplazó al Puente de Alcántara para mostrar al mandatario nipón el lugar donde dice la historia se ubicó el artilugio de Juanelo Turriano, en el que tanto interés ha mostrado

Juanelo Turriano, conocido también como el relojero del Emperador Carlos I de España, nació en Cremona el mismo año que el emperador. Juanelo fue arquitecto y matemático mayor. El rey le mandaba donde los demás fallaban: Acequia de Colmenar, desagües de Aranjuez, la reforma del calendario y, por supuesto, el "Artilugio de Juanelo", que subía contra natura las aguas del Tajo al Alcázar de Toledo.

No se le correspondió como bien merecía. Murió pobre y se llevó el quid divinum del Artilugio que elevaba diariamente 17.000 litros de agua a una altura de 90 metros con un recorrido de 300 metros. Dejó escrito: qui sim scies, si par opus facere conaberis (entenderás quien soy si intentas hacer otra obra igual a ésta). Y añadía, "cuando no llega el número, pongo arte".